Abro de nuevo esta puerta virtual tras mi desconexión veraniega. Me asomo a esta ventana virtual con el deseo y la esperanza que todo siga igual, incluso que todo haya mejorado.
Es momento de abrir la puerta a nuevos cursos, nuevas etapas, incluso tendré que dar la bienvenida a un nuevo otoño.
En cualquier caso, mejor ir día a día, abriendo y cerrando puertas según sea preciso...y siempre abriendo las páginas de un buen libro.Abro la primera puerta.
Es una gran habitación soleada.
Un camión pasa por la calle
y hace vibrar la porcelana.
Abro la puerta número dos.
¡Amigos! Vosotros bebisteis la oscuridad
y os hicisteis visibles.
Puerta número tres. Una estrecha habitación de hotel.
Vistas a un callejón.
Un farol que reluce en el asfalto.
El hermoso residuo de las experiencias.
Tomas Tranströmer (Elegía)