miércoles, 25 de octubre de 2023

Al son del viento






 El viento y las hojas secas de los árboles forman una inigualable pareja de baile en las calles de la ciudad. 


El viento ágil de una tarde de otoño marca los pasos de las delicadas hojas que danzan y danzan hasta que, suave y lentamente, descienden alfombrando las aceras.


 Sonrío, sentada en un banco después de la tremolina que se ha formado. Disfruto del otoño que, por fin, ha llegado. Y pienso...


 me gustaría ser árbol o ser hoja, desapegarme de algunas cosas, dejar ir aquellos pensamientos que duelen o situaciones del pasado que ya no me corresponden... volar alto, alto al son del viento...


Octubre ya se está yendo, y apenas me he dado cuenta de su presencia.
Intentaré estos días aprovechar su especial encanto. Dicen que el otoño es la estación del alma, momento de mirar para dentro y volver a renacer con el nuevo año.



Ay, árbol del vivir,
árbol de la ilusión y de los desengaños,
de las revelaciones.
Cuando te agita el viento de la edad,
las hojas secas se caen.
Pero en la rama aún verde de la infancia
-la que está más arriba, la que en la luz se mueve-
canta el jilguero.

 La rama verde (Eloy Sánchez Rosillo)