sábado, 28 de enero de 2017

Después de la lluvia









En el atardecer, después de la lluvia,
el sol acariciaba las piedras  de la antigua ciudad
de una especial manera,
con un profundo y limpio y natural amor.



 Y al mirarnos supimos que éramos conscientes
de aquel minuto prodigioso,
de aquella intensa belleza inestable.

Eloy Sánchez Rosillo



 

4 comentarios:

  1. Muy bonito el texto y unas imágenes muy bien elegidas.
    Un beso

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    1. Me gusta mucho este poeta.
      Gracias, Juan Carlos.
      Te deseo una feliz semana.
      Besos

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  2. Lo leí ayer por la noche, y me vino muy bien.
    Cuántos momentos prodigiosos vivimos.
    Este poema me encanta.

    Un beso.

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    1. Cuánto más leo a Rosillo, más me gusta.
      Besos, querida Rosa.

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