UN VASO DE AGUA
Qué suceso increíble:
llené un vaso de agua y lo alcé hasta mi boca.
Era ya media tarde. Me había detenido
cerca de una ventana, aquí, en mi casa,
en este día tan claro de febrero.
Llegó el vaso a mis labios
y en ese mismo instante lo atravesó de pronto
un haz muy apretado y muy intenso
de luz del sol poniente.
Cuántos asombros. Todo rompió a arder
con lumbre limpia y mágica:
el agua y el cristal, el cuarto entero,
mis ojos y mis manos y mi vida.
Sin dar ni un solo paso estuve en todas partes.
No sé cómo decir lo que ocurrió,
cómo expresar que sucedieron siglos
de redención y bienaventuranza.
Oro licuado y tembloroso el mundo,
astilla viva yo de un súbito diamante.
Eloy Sánchez Rosillo
«Una obra nunca se acaba, sino que se llega al límite de las propias posibilidades»
Antonio López
PD: Todas las imágenes son obras pictóricas de María Moreno, pintora, del grupo de los realistas de Madrid, fallecida recientemente. Un pequeño y humilde homenaje a una gran mujer.
Fíjate que me he quedado mirando as imágenes y he dicho,qué belleza,qué luz ....
ResponderEliminarPrecioso el poema que le viste de misterio y brillo donde los haya!
Te felicito y a la pintora DEP.Geniales las artes unidas a la Naturaleza
Besucos
Gó
Abrazos, Gó.
EliminarUn pequeño homenaje a una mujer pintora.
Leí de su muerte, Antonio debe estar destrozado, siempre juntos en todo. Este homenaje sirve para recordarla. Abrazos
ResponderEliminarUn matrimonio artístico donde los haya.
EliminarBesos, Ester.
Esas imágenes son excelentes. El texto nos hace recordar el milagro de la avida, incluso en ese reflejo en al agua de un simple vaso.
ResponderEliminarPrecioso post. Un abrazo
Si nos damos cuenta, todo en la vida es un pequeño milagro, y hay poesía en cada milagro de la vda. Besos, Albada
EliminarSin duda una perdida triste, ella dejo su obra y sus amigos como en este caso tu un precioso homenaje a su recuerdo DP.
ResponderEliminarUn abrazo .
Gracias, Campirela. Me gustó mucho una exposición en el Reina Sofía...
EliminarAbrazos
Tus textos siempre resultan evocadores, Maite y hoy además vienen acompañados por las preciosas obras de María.
ResponderEliminarMe ha encantado el post.
Besos
Me alegro que te haya gustado, Isabel.
EliminarBesos y feliz semana
Me uno a este homenaje, Maite. Es precioso.
ResponderEliminarMil besitos con cariño ❤️
Gracias por ello, mi querida Auro.
EliminarFeliz semana
Besos
Me uno a tu homenaje muy merecido
ResponderEliminarUn abrazo fuerte para ti y cuídate mucho, estos resfriados tienen muy mala sombra, te lo digo yo que lo estoy sufriendo.
Gracias, Tracy. Ya estoy mucho mejor!!!
EliminarAbrazos
Muy bonito homenaje.
ResponderEliminarUn placer llegar hasta aquí.
Besos.
Besos agradecidos, querida Amapola
EliminarHa muerto la compañera del pintor manchego más universal. Su personalidad artística pasó como desapercibida del gran público, seguro que por la importancia del trabajo del gran Antonio López.
ResponderEliminarPero ha sido una pintora de "atmósferas", más cerca de Antonio López Torres, (tío de su marido), que de este mismo.
El poema de Eloy Sánchez Rosillo, muy bien elegido.
Besos.
Eso he leído en su biografía, Juan.
EliminarGracias por tu comentario.
Besos
Un homenaje precioso.
ResponderEliminarMe ha gustado todo, todo.
Besos.
Abrazos infinitos, Toro poeta.
EliminarUna pintora que no conocía, María Moreno. Y un poeta que tampoco conocía: Eloy Sánchez Rosillo. Ambos unidos nos ofrecen el milagro de la luz, que enciende la mente y el corazón.
ResponderEliminarGracias por elegirlos, Maite.
Mi abrazo y feliz semana.
Tus comentarios son tan poéticos, Mª Jesús...
EliminarGracias. Te deseo una feliz semana
Solo un poeta puede hacer arte de un simple hecho. Qué grande.
ResponderEliminarUn poema, inmenso.
Precioso homenaje a María Moreno.
Besos, Maite.
Es el poeta del fervor de las cosas, me gusta mucho.
EliminarGracias, Verónica.
Es tan precioso.
ResponderEliminarTodo. Me encanta.
Descanse en paz María Moreno.
Te dejo otro poema:
Imagino una tarde de verano
y un vaso de agua fresca en la ventana.
Los niños se han marchado.
La mujer coge el lápiz
y dibuja la escena:
un instante vacío
en que no pasa nada.
Ahora habita el papel y ese papel
una sala remota en un museo.
Todo lo que no muere
habita algún lugar
a la espera de un ojo que lo vea.
Su lápiz, por ejemplo,
que vive en este lápiz,
y el reflejo estancado en el alféizar
de una luz y una hora que no existen,
o esa mano de otra y que es de todas
abriéndose en mi mano
como una flor de nadie
entregada a la sed,
al sencillo misterio
que es a veces la vida:
este vaso de agua.
«Un vaso de agua», de Lola Mascarell.
Muy feliz tarde, querida amiga.
Muchos besos.
Gracias, Rosa, por este otro bello poema.
EliminarFeliz semana.
Miles de besos
Qué belleza de versos, qué belleza de imágenes, gracias por compartir tanta belleza, un hermoso homenaje.
ResponderEliminarUn inmenso abrazo!!
Miles de gracias y más besos para ti, Rosana.
Eliminar¡Qué bonito Maite! Me encanta esa combinación que haces tan bonita entre imágenes y versos. ¡Besos! :D
ResponderEliminarGracias, Margarita. Te deseo una feliz semana.
EliminarBesos
Hermoso poema, acompañado de gratas imágenes. Tendré en cuenta a María, ya que no la conocía.
ResponderEliminarAportas Paz, Maite.
Besos Ricardo.