Aquí estoy, sentada al lado de la ventana, en mi pequeño rincón, donde disfruto de un rato de calma y serenidad. Aquí estoy, sentada, esperando que el otoño dé algún indicio de su llegada, siento que se demora demasiado y ya tengo ganas de acurrucarme en mi sillón de lectura como cada otoño.
Mientras espero tan anhelada llegada, me entretengo tejiendo "crochet"; ¡vaya, labor que se ha puesto de moda entre las amantes del "todo hecho a mano"!. Me parezco a mi abuela cuando hacía ganchillo en las tardes de otoño, aún conservo la funda para la flauta del cole tejida con punto enano. Ella me enseño algunos puntos... ¡Qué recuerdos!
Pues sí, aquí me tenéis haciendo motivos otoñales a ganchillo para decorar la casa y para celebrar la llegada de mi amigo el otoño que se resiste a presentarse.
La verdad es que las calabazas quedan monísimas; una pena que las de verdad no hayan crecido en el huerto del pueblo, creo que sólo tenemos una como muestra.
Todo llegará, y las verdes hojas que aún están tan frescas en las ramas de los árboles, acabarán tiñiéndose de esos hermosos colores ocres, rojizos y anaranjados y finalmente caerán, lenta y pausademante...
Ya tengo preparado mi centro de mesa, más otoñal no puede ser... me quedo tejiendo "crochet", palabra de moda; ¡vale!, mejor: sigo tejiendo a ganchillo, mientras veo algún capítulo de "Las chicas Gilmore", nada más típico del mes de octubre. Y aquí sigo, dispuesta y disponible.
" Estar aquí, dispuesto, disponible,
ocioso en apariencia, pero atento,
no puede ser en vano,
aunque haya horas
de alma desierta y corazón baldío.
Mucho importa la espera. E irán viniendo
días en los que todo te acompañe.
¿No ves? valió la pena
no desmentir la vida
en las jornadas en que no supiste
escuchar ni mirar ni ser paciente.
En ellas germinaban
estos momentos iniciales de hoy.
La aurora se ha extendido por el cielo.
Sientes dentro de ti su luz primera
y crece y se hace el día en tus palabras.
Eloy Sánchez Rosillo
El otoño se demora...
ResponderEliminarAquí hace días de ir a la playa.
Al invierno ni lo espero....
Besos.
Tendremos que ser pacientes, seguro que acaba apareciendo, querido amigo Toro. Un fuerte abrazo.
EliminarEstar pendiente de la vida aun haciendo labores es estar vivo y disfrutando. He sido muy activa en labores, en manualidades, costura... Un abrazo tejido a mano
ResponderEliminarHacer labores me entretiene y me gusta. Ya empiezo a preparer detalles a regalar. Besos, Ester
EliminarQue bonito el otoño que nos ofreces, gracias .
ResponderEliminarUn 😘😘🌹🦋
Es que el otoño es hermoso, amiga Campirela. Abrazos de fin de semana
EliminarPocas cosas hay más agradables que acurrucarse en un sofa a tejer una tarde de otoño.
ResponderEliminarPor aquí parece que va legando pero se está haciendo de rogar demasiado.
Besitos
¡Qu´ete voy a contar! Sí, parece que se hace de rogar, Isabel. Pero al final, llegará. Abrazos
Eliminar¡Qué maravillas haces, mi querida MAITE! siempre me dejas con la boca abierta. Y no te precupes, aquí hasta antes de ayer seguía siendo verano, pero en dos días ya estamos de absoluto y riguroso otoño, chorreando como solemos estar por aquí en estas fechas, ya tocaba... todo llega y está bien que así sea ..
ResponderEliminar"Sientes dentro de ti su luz primera
y crece y se hace el día en tus palabras."
Precioso todo aquí, como siempre,
si no llega el Otoño a esta deliciosa llamada tuya está ciego , sordo y tonto perdido : )
Un beso con todo mi cariño, cosa guapa!!
Queridísima María, si lo llego a saber, escribo antes esta entrada. Parece que ya llega, días nublados y ventosos, la escasa lluvia, por la noche. Muy tímidamente aparece el otoño por Madrid. Puedo ver que las hojas van destiñéndose de amarillo, aunque sigan muy sujetas a las ramas, no creas. Este fin de semana cambio de escenario, veré a ver si el otoño ya ha llegado por el pueblo. Un fuerte abrazo
EliminarEstás hecha una artistaza, anda que no sabes ná!!! Has hecho esas monerías para atraerte al otoño, pero va a ser que no, él está queriendo conquistarme, porque sabe que no me gusta y me manda calorcito para que yo creo que estamos en verano.
ResponderEliminarOye, y lo está consiguiendo.
Ja ja ja acabo de terminar de coser unas fundas para mis abanicos, que los tengo que tener a mano, así que ya ves que también le estoy agradecida al verano que tanto te gusta, a mí me agota el calor... Y sí, a ver si termino mi centro de mesa de calabazas y doy la bienvenida a mi amado otoño. Sigue disfrutando del buen tiempo. Abrazos, querida Tracy.
EliminarHola, Maite, qué cosas tan bonitas haces y escribes. Gracias por esa paz que he sentido leyéndote y por esos motivos otoñales de tu mano y paciencia, qué belleza y tranquilidad aportas.
ResponderEliminarMil gracias.
Hasta pronto.
Gracias a ti, Clarissa por leer y comentar. Y me alegra saber que un poco de paz y tranquilidad has encontrado por aquí. Mil besos
EliminarQué preciosidad otoñal nos traes, querida Maite; ya por aquí se va notando, y cierto es que llama al recogimiento... Me ha encantado esa guirnalda de champiñoncitos y las hojas de ganchillo, y los vestidos de las calabazas, chulísimos... ya nos contarás por cual labor te has decidido, hacer crochet y meditar van de la mano, uno abstrae la mente de tal forma que queda uno como nuevo...
ResponderEliminarMuy feliz otoño, lleno de hojas de mil tonalidades, Maite, un abrazo bien cálido.
Tienes razón, hacer ganchillo es una forma de meditar, a mí personalmente me relaja muchísimo. Voy a hacer un centro de mesa con las calabazas... a ver qué tal sale. Gracias, Milena. Feliz otoño y un fuerte abrazo.
EliminarMaite, tus labores y tus libros hacen buenas migas, amiga...Tu casa se llena de belleza otoñal, mientras tu alma disfruta de la madurez y serenidad de este tiempo...Realmente es agradable mirar por la ventana y disfrutar de los colores del cielo y la naturaleza. Todo ello nos impulsa a la esperanza y a seguir adelante con confianza...Muy bello tu post, amiga escritora.
ResponderEliminarMi abrazo entrañable y feliz otoño.
Gracias, María Jesús. Es cierto que ahora apetece más estar recogida leyendo o haciendo labores o lo que más guste. Me gusta mucho esta época e intento disfrutarla. Los paisajes otoñoles son una verdadera obra ´de la naturaleza. Un inmenso abrazo
EliminarDispuesta y preparada para estas creaciones manuales. Arte en su medida!
ResponderEliminarArte del que estoy privado! :)))))
Si bien activo y creativo! No me aburro en absoluto.
En otoño estamos ya. Si bien con una intensidad reducida... Esos colores que describes ya se expanden por doquier. Y el fuerte viento que ha soplado estos días ha llenado las calles de hojas jugando a alcanzarse unas a otras.
Ese rincón de lectura, resulta acogedor!
Abrazos, Maite.
Muchas gracias, Ernesto. Ya he visto que por el norte el viento sopla de lo lindo. Y que la lluvia ha hecho acto de presencia. Por allí, debe ser el paisaje en las tonalidades otoñales una maravilla. Está genial eso de no aburrirse. Un fuerte abrazo
EliminarQuerida Maite, por fin llegó, que encima de corto si no llega...
ResponderEliminarMe encantan tus calabazas y las hojas. Yo soy inútil para las manualidades.
El poema es un canto de esperanza.
Feliz otoño.
Besos.
¡Ummm! Sí, parece que el otoño va llegando a la ciudad. El porma es una maravilla, cierto, querida Verónica. Tus comentarios han llegado ahora. Ya sé que blogger anda revuelto...
EliminarFeliz finde otoñal. Abrazos