El otoño sigue imparable su camino, aunque el frío de esta época del año no se haga notar en exceso. Lo cierto es que siento otro tipo de frío helador que me congela por dentro... ¡bah! ya tengo los noticiarios para seguir helándome, vengo aquí para llenarme de calidez y cordialidad.
En estos días de otoño me resguardo en el hogar cuando la preocupación intenta filtrarse por cualquier rendija
salgo a dar un paseo; una breve pausa necesaria para respirar la silenciosa sabiduría de la naturaleza.
Me gusta la suave y tenue luz de estos días del mes de noviembre que puedo disfrutar en mis breves pausas, o cuando soy capaz de parar y observar con detalle la belleza de cada momento que pasa.
Es posible encontrar un poco de calma, quietud, alegría en cialquier rincón escondido, a veces, es cuestión de parar y sólo respirar...
Ahora que ya remonto la mitad del camino de mi vida,
yo que siempre me apené de las gentes mayores,
yo, que soy eterna pues he muerto cien veces, de tedio, de agonía,
y que alargo mis brazos al sol en las mañanas y me arrullo
en las noches y me canto canciones para espantar el miedo,
¿qué haré con esta sombra que comienza a vestirme
y a despojarme sin remordimientos?
¿Qué haré con el confuso y turbio río que no encuentra su mar,
con tanto día y tanto aniversario, con tanta juventud a las espaldas,
si aún no he nacido, si aún hoy me cabe
un mundo entero en el costado izquierdo?
¿Qué hacer ahora que ya no soy más joven
si todavía no te he conocido?
Piedad Bonnet
(Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana 2024)
Unas fotos muy bucólicas y muy propias del mes de otoño.
ResponderEliminarSaludos
Gracias, Emilio. Feliz noche
EliminarMuy bonita entrada tanto en imágenes como en palabras.
ResponderEliminarLa poesía muy, muy bonita. Un besote, feliz otoño, ya nos va quedando menos.
Gracias, Campirela. Un fuerte abrazo
EliminarEl otoño nuestro, el del espejo, el del dolor de rodilla, el que paliamos con un café y un buen libro, ese otoño que tornará vivaces los años en cuanto huela a mar, cuando los días sean largos, cuando la luz sea clara. Gracias por traer a Piedad Bonnet. Un abrazuco
ResponderEliminarTodo llegará, Ester. La vida sigue su curso y su ciclo. Abrazos y feliz noche
EliminarTus otoños son impresionantes, cada vez me gustan más y hoy además le has puesto esa guinda de Piedad Bonnet y de verdad que te ha quedado apetitoso.
ResponderEliminarCuánto me alegro, Tracy. Gracias por venir. Besos
EliminarMi querida MAITE, creo que ha sido tu cumple, o eso me ha parecido entender de este precioso deslizar tuyo sobre este otoño de hojas crujientes que ha llegado con tanta agua y dolor a cuestas, menos mal que tu sensibilidad y delicadeza nos deja siempre esta dulzura tierna en los ojos con todas estas preciosas imágenes y deliciosa poesía que nos regalas, graaaciaasS, es imposible no devolverte esa misma cordialidad que tu buscas y todo el cariño que inspiras, espero si ha sido tu cumple que hayas disfrutado y no digas que ya no eres joven, aun con 100 años siempre lo serás, tu alma es de niña, chiquitina y achuchable ¡¡muuuchas felicidades preciosa!!! Un beso inmeeenso y .. for you, baby! ; )
ResponderEliminarMi querida María, no es mi cumpleaños, pero te agradezco de la misma manera como si me hubieras felicitado en su día. Me gustó el poema de Bonnet, quise leer algo de esta poeta porque había sido premiada.
EliminarMi cumple fue a primeros de agosto, y en alguna ocasión me he regalado la luna: https://exlibrismaiteblog.blogspot.com/search?q=luna
Agradezco tu comentario tan cariñoso. Feliz lunes y feliz inicio de semana, ya en diciembre... Besos
qué bonitas imágenes. el color dorado de las hojas le da a esta estación una magia especial.
ResponderEliminarel paso del verano al otoño quizá es el que puede resultar algo más triste. del otoño al invierno, pues ya qué más da, algo más de frío. a partir del 21 de diciembre, el día más corto del año, ya sólo vamos a mejor.
abrazos, maite!!
El otoño me gusta muchísimo, Chema, y los días de noviembre mis preferidos. Todo es cíclico y hay que experimentar el afán de cada día. Miles de besos
EliminarMuy bueno, triste, pero es la vida que hay que asumirla tal como es.
ResponderEliminarSAludos.
Cierto, hay que aceptar la vida tal cual. Gracias Manuela por tu visita. Abrazos
EliminarLos paseos en esta época del año me encantan sobre todo si son en entornos naturales: hay un colorido y una luz muy especiales.
ResponderEliminarEn el otoño uno tiende más a la melancolía y a la reflexión sobre el propio ocaso de la vida.
Unos versos hermosos
Besitos
Parece que el otoño tiene ese cariz de melancolía, pero es hermoso en entornos naturales como bien dices. Te deseo lo mejos para esta semana con fiesta incluída. Gracias, Isabel. Abrazos
EliminarMaite, nos invitas a pararnos, a sentir la magia del otoño...y lo hacemos contigo en cada imagen que nos dejas. Vivir el momento presente es importante, paramos el tiempo y sentimos ese reflejo eterno, que nos deja cada día el sol al atardecer...El poema de Piedad Bonnet es una preciosidad. Mira frente a frente su madurez y reconoce, con humildad, que aún le falta mucho por conocer..."aún no he nacido"
ResponderEliminarTe dejo mi abrazo agradecido por tus buenos y genuinos posts, Maite.
Cierto, querida Mª Jesús, en eso consiste la madurez de la vida, a pesar de lo vivido, reconocer que falta mucho por conocer. Te agradezco tu comentario. Feliz semana. Besos
EliminarNada como un buen paseo en otoño, los árboles están preciosos con sus tonos ocre y rojizos.
ResponderEliminarPrecioso poema de Piedad Bonnett, hace reflexionar sobre el transcurrir de los años.
Un abrazo, Maite
Son reconfortantes los paseos otoñales, Milena. Me alegro que te haya gustado el poema. Besos
EliminarBello post. Me gusta como escribe y poema Piedad Bonnet. Abrazos.
ResponderEliminarGracias, Isabel. Un fuerte abrazo
EliminarAhora que somos otoño, verdad?
ResponderEliminarEs nuestra estación.
Que tarde en llegar nuestro invierno.
Besos.
Somos otoño? Ja ja ja el invierno a la vuelta de la esquina. Pero con tanto cambio climático a lo mejos somos una primvera eterna. Gracias Toro, miles de besos
EliminarUna preciosidad de entrada tanto en palabras como en imágenes. Piedad Bonnett como poeta y ensayista es admirable. Leí hace tiempo el libro sobre el suicidio de su hijo y a pesar de los años transcurridos aún me encuentro impactado.
ResponderEliminarUn beso
Gracias, Juan Carlos, sí, impactante el libro sobre el suicidio de su hijo. Te deseo un feliz lunes. Abrazos
EliminarMaite, qué entrada más hermosa.
ResponderEliminarAcaba este noviembre tan cálido, anodino. Ganas de pedir el libro de reclamaciones. Sonrío.
El poema me ha gustado mucho. No he leído a esta poeta y tomo nota.
Besos, querida amiga.
Suscribo tu comentario, Verónica... veremos que nos depara diciembre. Un fuerte abrazo.
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