El faro, ahí está, imponente e inalterable. Siempre mirando al mar, aguantando agitadas mareas embravecidas o contemplando las sinuosas aguas en calma.
Al llegar la oscuridad de la noche, iluminan y guían con su señal de luz a los marineros y navegantes. En la tempestad, su luz puede orientar el rumbo perdido.
Un lugar muy literario, tanto para narrar bondades como describir la fiereza del mar. Un lugar íntimamente conectado con la naturaleza.
Solitario y robusto, espectador de mil y una aventura, el faro ilumina y es protagonista de historias que nos cuenta un libro.
"El faro de Cuatro Vientos estaba construido sobre un acantilado de roca arenisca roja y sobresalía por encima del golfo... Era una costa que conocía la magia y el misterio de la tormenta y de las estrellas."
Ana de las Tejas Verdes (L.M. Montgomery)
"Fuera, la oscuridad es casi total y las ráfagas de luz del faro barren
el cielo como manos sobre un enorme retal de terciopelo viejo."
El tiempo que nos une Alejandro Palomas
"«¡Ah, qué hermoso!» El blanco Faro, lejano, austero, se hallaba
en medio; a la derecha, hasta donde alcanzaba la mirada, desvaídas e incesantes, con
delicados pliegues, se veían las dunas de verde arena, con sus flores silvestres
sobrevolándolas, que parecían correr perpetuamente hacia algún deshabitado país lunar."
Al faro. Virginia Woolf
¿Sabéis de libros cuyo protagonista sea un faro? Felices lecturas!!!