Hoy saldré a la calle con mis mejores galas,
y engalanaré mis pensamientos con un gran sombrero
que dé sombra a mis hombros cargados de verdades escondidas.
Llamaré poderosamente la atención: ¡una mujer con sombrero!
Nadie sabe que lo llevo como un grito de mujer.
Se quedarán mirando los pétalos de rosa que cubren mi cabeza
y, nadie sabrá que lo llevo para recordar lo mismo
por lo que otras mujeres, años atrás, decidieron despojarse del sombrero,
clamando su derecho a pertenecer al justo episodio de la historia
que siempre queda en el olvido eterno de los libros de texto.
Hoy luzco un sombrero con la elegancia de mi condición de mujer,
que piensa, que llora, que gime, que ríe, que grita … que vive,
que es madre, que es hija, que es compañera y que se siente libre
para salir a la calle en la profunda noche sin miedo a ser zaherida,
sin girar la mirada a diestro y siniestro,
sólo atenta a la luz de la luna y al titilar de las estrellas.
Hoy llevo puesto un enorme sombrero, un gesto de sensata locura,
una esperanza que durará hasta el último segundo de la eternidad
para pensar que una mujer es una mujer, con y sin sombrero.
Relato perteneciente a la propuesta "El Sombrerero Loco"
Mi agradecimiento para Ginebra Blonde por su ingenio, su generosidad y su pasión por las letras: GRACIAS DE CORAZÓN.
Podéis leer más relatos aquí
Desde este humilde blog reivindicar alas editoriales educativas que mencionen a las mujeres que formaron parte de la generación del 27. El conjunto de poetas y escritores que revolucionaron la cultura española no sólo estuvo formada por grandes figuras masculinas, también de excelentes mujeres pintoras , escritoras y poetas. Por ellas
estupendo relato, reivindicando una igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres que antes no existía. el que ciertos trabajos como el de escritor, por ejemplo, fueran considerados de hombres era un convencionalismo social sin ninguna lógica.
ResponderEliminarbesos!
Y siguen sin estar en los libros de texto.
EliminarGracias, Chema. Feliz día.
Besos
Estupendo post.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho como has enfocado el texto y el desarrollo de la entrada.
La imagen elegida para la historia...perfecta.
; )
Las Sin Sombrero se merecen el reconocimiento que no tuvieron.
(Hace poco hubo una exposición chula en Fuenlabrada).
Una mujer es una mujer...claro!
Besossssss
Gracias, Carmen.
EliminarEstuve intentando escribir otra cosa, algo que encajara con las indicaciones de Ginebra, pero con la palabra "sombrero", ya no me salía nada.
Besosss
Me gusto cuando lo he leído antes y sigo pensando que has hecho un buen relato sobre todo a la defensa de esa mujer que merece vivir y sentir ..
ResponderEliminarY por supuesto todo mi apoyo a ese homenaje a la generación del 27 , gracias a ellas muchas de hoy siguen sus pasos no solo a nivel educativo y literario sino en todos los ámbitos de la sociedad.
Un fuerte abrazo y feliz día del trabajador por los derechos de tod@s.
Por un trabajo digno para todos. Así es. Espero que pronto pueda leer
Eliminarlos nombres de estas mujeres en los libros y en las antologias, de momento,
voy viendo poemarios de alguna de ellas.
Besosss
Agradecerte y felicitarte, nuevamente, por tu magnífica participación, mi querida amiga. Una hermosa oda a la mujer. Y, por supuesto, me aúno a este homenaje que nos dejas a todas ELLAS. Todas y tantas que nos tendieron ese puente que debemos continuar construyendo y cruzando.
ResponderEliminarAbrazos y cariños enormes, y muy feliz tarde 💙
Gracias a ti, Ginebra.
EliminarPor todo, me encanta participar en tu Paraiso de Letras.
Y mi profunda admiración por toda la recompensa que nos das.
GRACIASSSS.
Feliz tarde. Besos
Magnífico texto.
ResponderEliminarUna mujer es una mujer, por supuesto.
Sobre lo que dices de las editoriales, se adaptan a los programas oficiales y, sí, por ejemplo, en el campo de la Historia del Arte, no aparece ninguna mujer. Lo mismo en Historia de la Filosofía. En Literatura alguna, como santa Teresa, que sería el colmo si faltara.
Ni una en otros campos. Y las hay muy buenas, Berthe Morisot, María Zambrano, y tantas ...
Te dejo un documental:
Las Sinsombrero
Un beso y feliz semana, Maite.
Gracias, Rosa. Me parece injusto que los jóvenes no puedan estudiar que existen mujeres que también filosofaron, hicieron poemas y dedicaron su vida al arte.
EliminarGracias por el documental. Lo veré con calma.
Besosssss
Ese complemento que tan poquito usamos y que nos sienta bien, casi siempre
ResponderEliminarPrecioso canto a un sombrero. Que lo disfrutes. Un abrazo
Me encantan los sombreros, y sólo los uso en verano...
EliminarAbrazos, Albada
Como ya te dije allí, aquél movimiento retrataba una protesta, llevarlo es reivindicar nuestra forma y manera... nuestro derecho a ser Mujer.
ResponderEliminarGran elenco las de aquél movimiento.
Mil besitos y feliz noche ♥
Gracias, Auroratris. La generación del 27 es a la que más tiempo le he dedicado y me enfadé un poquito cuando en un libro de cuarto de la ESO, no mencionaban a ninguna mujer, grrrrrrr.
EliminarBesosss y abrazos
Muy bueno, Maite.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho.
Las verdades no han de quedar escondidas.
Que salgan a la luz.
Me da mucha rabia que se ignore el talento femenino, por no hablar de cosas peores que todavía siguen sucediendo.
Besos
Gracias, Paloma. Así es, debe llegar el momento de reconocer el talento femenino también.
EliminarFeliz tarde
Cualquier símbolo que nos signifique como mujeres, cualquier muestra de que lo somos y orgullosas de serlo. Un sombreo tiene la gracia de que a diferencia del de los caballeros nosotras no tenemos que quitarnoslo al entrar en un lugar cubierto. Un sombreo es magnífico y tu relato mas. Abrazucos
ResponderEliminarJa ja ja el sombrero nos queda bien...
EliminarMe gustó mucho tu alegato "Soy mujer".
Feliz tarde
No lo tengo, pero yo me quito el sombrero, ante tan magnífica oda a la mujer y lo que significa.
ResponderEliminarEspero que tu grito se pueda oir , alto y claro, donde corresponda.
Besos.
Ójala y sean reconocidas y estudiadas... abrazos manchegos, con sonido de mayos
Eliminary rondallas por las calles. En un rato, salimos a ver cruces.
Besosss
Me ha encantado Maite, qué maravilla. ¿Sabes? En la presentación de mi primera novela, en Cañada Rosal, mi familia me regaló un sombrero rojo precioso por la leyenda del sombrero rojo.
ResponderEliminarMuchisimos besos :D
Ese sombrero rojo y vestido de morado???? Me encanta, ya voy llevando ese sombrero.
EliminarBesosss
Yo me quito mi sombrero invisible y me descubro ante ti.
ResponderEliminarMi aplauso y mi admiración!!!
Besos.
Idem
EliminarGracias, Toro.
Abrazos
Sonrío.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho, Maite.
también me gustan los sombreros y las sin sombrero, gracias por mencionarlas.
Besos.
Un fuerte abrazo, Verónica.
EliminarCon sonrisassssss.
Besosss
Las Sin Sombrero,...efectivamente...sin ellas muchas conversaciones del 27 no se habrían dado...Nada como ver fotos, y observar que ellas estaban allí...que deambulaban, pensaban, aconsejaban...leían y escribían...Vivían en la Generación del 27 que las ha olvidado...y menos mal...como bien dices que se está recuperando su recuerdo. Tengo el libro en casa, porque lo necesito...es necesario para estos momentos...sin duda alguna.
ResponderEliminarCon respecto a tu poesía...quería dejar lo mejor para el final...qué bonito...qué bien describes esa necesidad de visibilidad...Precioso. Me ha gustado mucho.
Por cierto...yo también escribo con sombrero...no muy grande, pero me ayuda a guardar mejor las ideas.
Un abrazo grande.
Me alegro que tengas cerca ese libro, hay que leerlas y darlas a conocer porque merecen ser reconocidas.
EliminarGracias por tu comentario, María. Te imagino escribiendo con ese sombrero. ;)
Muchos besos