Me siento a esperar el poema
de espaldas a la luz
en la pequeña casa
que habitamos.
No puedo remediar el griterío,
la percepción de ruidos trepadores,
en este quinto piso, de horas menguadas,
sin paisaje. Sólo el fervor de las cosas,
su obediente compañía.
de espaldas a la luz
en la pequeña casa
que habitamos.
No puedo remediar el griterío,
la percepción de ruidos trepadores,
en este quinto piso, de horas menguadas,
sin paisaje. Sólo el fervor de las cosas,
su obediente compañía.
Dionisia García (Diario abierto, 1989.
Morgan Weislting
Excelente!!!
ResponderEliminarSencillo y definitivo.
Besos.
Un poema sencillo, pero como dices, excelente.
EliminarBesos, Toro.
Creo que aunque cayeran rayos y centellas, tu poema saldría bellísimo, como ha salido este.
ResponderEliminarPrecioso!
Muchos besos.
Hacer poesía no es fácil, por eso os admiro tanto a quienes versáis.
EliminarBesos miles, Carmen
No, yo no soy poeta... solo me entretengo poniendo las cosas que siento. Eso mismo si quisieras lo puedes hacer tú. Lo que pasa es que soy muy atrevida :)
EliminarMuchos besos.
El eco de la mística.
ResponderEliminarMe gusta mucho.
Un beso y buenas noches.
Sí, te gustará esta poeta.
EliminarFeliz fin de semana.
Besos
PD: te percibo muy atareada. Descansa estos días
Ha logrado atrapar el poema en medio del caos cotidiano. Es muy bonito.
ResponderEliminarVoy a investigar a esta autora, creo que ya has puesto algún otro poema suyo que también me gustó.
Besos, Maite.
La conocí el domingo, no físicamente, hablaron de ella en un programa de la radio.
EliminarEspero que te guste.
Feliz finde y muchos besos, Paloma
La casa en donde me habitas Señor mío y Dios mío.
ResponderEliminarVen que te espera mi alma anhelante. Has de ella tu morada predilecta.
Silencia el ruido y penetra en el silencio con tu amor.
Gracias Maite. Muy hermoso todo.
Un abrazo. Dios te bendiga
Gracias a ti, María.
EliminarUn fuerte abrazo
La piel, erizada.
ResponderEliminarBesos, Maite.
Sentí lo.mismo cuento lo leí.
EliminarBesos, Verónica