No habrá una sola cosa que no sea
una nube. Lo son las
catedrales
de vasta piedra y bíblicos cristales
que el tiempo allanará. Lo es la Odisea,
que cambia como el mar. Algo hay distinto
cada vez que la abrimos.
El reflejo
de tu cara ya es otro
en el espejo
y el día es un dudoso laberinto.
Somos los que se van.
La numerosa
nube que se deshace en el poniente
es nuestra imagen. Incesantemente
la rosa se convierte en otra rosa.
Eres nube, eres mar, eres olvido.
Eres también aquello que has perdido.
Los conjurados(Jorge Luis Borges)
Esta entrada se la voy a dedicar a Paloma. Después de leer su respuesta a mi comentario en su blog, me encontré con este poema de Borges. Sonreí y recordé... GRACIAS
Las fotos, de una servidora.
Hola Maite cariño , que bello poema .... Mira tú si soy sincera , que nunca medio por leer a Borges inculta que es una , espero este poema en conjunto con las fotos de las rosas se bonito de verdad , al igual que el bello homenaje para tú amiga , que estoy segura que le gustara , te deseo una feliz tarde besos de Flor.
ResponderEliminarMi querida Flor, no te tengo por inculta. Creo que eres genial. Y a Borges se le puede leer siempre que quieras o no. Para gustos, los colores. Te mando un fuerte abrazo.
EliminarBesossss
Ay,Maite, qué ilusión me ha hecho. Muchísimas gracias :) :)
ResponderEliminarY el poema es maravilloso, "somos los que se van". Eso somos. Nubes pasajeras.
"Y aquello que hemos perdido"
Por cierto que mirar nubes pasar es un entretenimiento delicioso
Un beso gigante, Maite.
Ja ja ja... fue de esas casualidades, cuando leí el poema me acordé de ti. Ver pasar las nubes es todo un deleite.
EliminarFeliz sábado. Muchos besoss
:)
ResponderEliminarBesos para las dos.
Y otro muy fuerte para ti.
EliminarBesossss
Os leí en la montaña.
ResponderEliminarMe encanta este poema.
Un beso enorme para Paloma y otro para ti.
:)
Gracias, querida Rosa.
EliminarTe envío muchos besos
Simplemente, Borges :)
ResponderEliminarBesos, Maite.
Simplemente....
EliminarUn abrazo, Verónica.